Canciòn urgente por la vida Campesina

El 30 de Enero nos dimos cita en la Plaza Bolivar del Eneal (cerca de Duaca-Edo. Lara), atendiendo el llamado del artesano cantor, (mi compadre, dirìa Ivanchenko), Agua Salà. De allì esperamos el bus de la Universidad Simòn Rodriguez para emprender un corto viaje hasta el plan del Guamal. Tamboral, Tinajitas, Tucuragua y Agua Salada, caserios que adornan el camino antecedieron la llegada que culminamos con una caminata con el anfitriòn . En cada encrucijada nos guia una pancarta, hecha por los compas, que indica la direcciòn a seguir o en su defecto un vaquiano , ya enterado de la actividad acudìa al auxilio de cualquier desprevenido.
Asì llegamos al Guamal, sitio donde se realizarìa la canciòn Urgente por la vida campesina. Tarima, sonido, expoventa, sitio para acampar y estacionamiento, nos dan
la bienvenida a lo que serìa una extraordinaria jornada llena de camaraderìa, solidaridad y calidad musical.
Empezar el año con una cita donde nos encontramos cultores de diferentes puntos de la geografìa nacional, para reivindicar al trabajador del campo , al medio ambiente e intentar
que esta actividad contribuya a fortalecer la organizaciòn popular, no es poca cosa, sobre todo si esta viene acompañada del esfuerzo mancomunado de todos, que con sus modestos aportes que van desde un viaje largo por sus propios medios, pasando por los colectivos con su tarima unos, el sonido otros, en la difusiòn del evento por los programas radiales, mensajes, en la vaca para la comida, etc. y en un lugar distante de la metropolis, nos indica que el trabajo cultural que se està realizando, va por buen camino, que esta masiva convocatoria tangible, no es casual y por consiguiente nos compromete mucho mas a mejorar en la coordinaciòn, la organizaciòn y en corregir aquellos errores que anteceden al movimiento cultural; parafraseando al poeta Pompilio Santeliz, salir del "manualismo y la ortodoxia" e intentar reiventarnos teniendo en cuenta la participaciòn de los jovenes con nuevas propuestas. En este caso, apoyar al movimiento campesino, donde el sicariato y el paramilitarismo a enlutado nuestro campo, es apoyar la lucha por la tenencia de la tierra, es luchar por la soberanìa alimentaria, es luchar contra la impunidad.

Asì que desde esta trinchera, vaya nuestro apoyo al camarada Agua Salà y a el equipo de trabajo que lo acompaño (Rene Torres por ejemplo), a esta iniciativa que se tiene que repetir, hasta hacerse cotidiana en el campo, en la comunidad, y en todos los espacios de la ciudad, que vaya de la mano con el acontecer polìtico social para no perder esfuerzos ni recursos que puedan desviar los objetivos.

El Colectivo Jesùs Gordo Pàez se hizo presente con la voz de nuestra Aurita Urribarrì, Mervìn Rodriguez, Mestizo, Araucara, Era Es, Carota Ñema y Tajà para compartir este "conjuro musical poètico" con el poeta del morralito, los muchachos de la Cantera de Miranda y Distrito Capital respectivamente, con la Tribu del Gûiro Roja del Zulia, con Gino Gonzàlez de Guàrico, y unos compatriotas venidos de las pampas de Argentina, Grupo "Aillu" que nos deleitaron con su baile y cantadurìas, el poeta y cantor Pompilio Santeliz, la poesia del "Cuarto de los Duendes". Momento estelar de la jornada cuando un niño (sobrino de Agua Sala) se montò a cantar las Casas de Cartòn acompañado del Agua Salà en la guitarra y tambien la interpretaciòn de la canciòn "Che Guevara" de nuestra siempre recordada Solimar Cadenas por el Grupo Era Es en la voz de otra niña.

El Grupo Trovadurìas, que despùes de una larga ausencia reactiva su andar le diò fuerza a la noche con canciones de Alì Primera y del folcklor larense para hacerle entrega al Ensamble Karuai y al paseo de estos por la geografìa latinoamericana.

Dos cosas para finalizar, las 20 cartas que dirigiò el anfitriòn a los entes estatales para que aportaran recursos para la actividad... ni medio ..".tan solo el corazòn intacto para hacer la revoluciòn y el Manifiesto para ver que va a pasar con la cultura, esta ùltima queda pendiente por discutir en las pròximas jornadas.